Etiqueta: Quinceañera

Claudia

Fue, de verdad, larga la espera,
cosechar un fruto que el destino niega.
Regalo divino que luego entrega,
en un instante Cristo, como si nos viera.

Pues solamente Él conoce del sueño negado,
de planes que se hicieron, de la incertidumbre.
Frustrados intentos que se hicieron costumbre,
y, premiando al cariño, por fin has llegado.

Ya siendo regalo de perseverancia,
te cuidan y velan, gozando su premio.
Hoy formas, pequeña, parte de su gremio,
y orgullosos recuerdan tu feliz infancia.

Regalo de Dios, los haces felices,
has llenado espacios de cariño faltos,
con besos, caricias, murmullos y cantos,
pintando su vida de hermosos matices.

Tus hermanos te miran con feliz ternura,
tu familia y amigos, presentes estamos,
abriéndote paso donde tropezamos,
ablandando esta vida que es cada vez más dura.

De niña a adolescente la metamorfosis,
de larva a majestuosa mariposa,
al volar la vida nunca reposa,
esperando encontrar una bella simbiosis.

Goza de tu fiesta, de tu vals y del momento,
al verte brotar, emana agua pura,
el manantial de amor, que es pura locura,
lavará con lágrimas tu sufrimiento.

Alcemos y brindemos, quinceañera,
con la copa y el vino de la vida,
y, borrachos por la Pili consentida,
esperamos brindar por mil primaveras.

Sé lo que todos esperamos en tu vuelo,
cruzando el camino más recto, más seguro,
si te sales de lo indicado, un alto muro impedirá que realices tus anhelos,
peligrará, por momentos, tu futuro, mariposa.
Tú eres lista, no mires hacia abajo, sino al cielo.

Valeria

Cuando existe amor, ¡existe todo!
todo es: ilusiones sin fronteras.
Buscas la felicidad de mil maneras
te entregas y te das de muchos modos.
Todo es limpio, ¡limpio todo!
palpitar de corazones,
mil sonrisas y canciones,
mil abrazos y mil besos,
todos los poros ya confesos,
deciden destino y condiciones.

Ellos Amantes en concierto,
trabajando enamorados,
nacen tres hijos amados,
es amor, eso es lo cierto.
Y el porqué de su alegría,
los cultivan día con día, 
son de sus flores coraza
cuidan el fruto de casa,
y cuidan también la dinastía.

Hoy, la más pequeña fruta
al caer trae su fortuna,
hermosa como ninguna
y nadie se lo disputa.
De bella no hay sustituta,
y de hermoso corazón
la nobleza es su blasón,
y de los padres orgullo,
sin duda tiene lo suyo
esta edad de la ilusión.

Hoy sus quince primaveras
el mundo la felicita,
pues de niña a señorita
ha cruzado otra frontera,
le espera una vida entera
de vivir otras verdades,
habrá dolor y bondades,
soledades y alegrías
amores y fantasías
mas le sobran facultades.

Es alegre y dedicada,
sin dudar saldrá adelante,
es estrella titilante,
también amiga entregada.
Inteligente, avispada,
vida sana en cuerpo sano,
el deporte es aeroplano,
donde vuela sin pensar,
estudiar y bienestar,
va su vida de la mano.

Eres ¨Sana y «valerosa¨»
significado… Valeria
eres alegre, eres seria,
y elegante como rosa.
Hoy pasaste a otra cosa,
a dejar huella imborrable,
que seas ejemplo palpable
en tus actos de la vida,
ser por siempre positiva,
cuidadosa y responsable.

Demos gracias al destino
que podamos festejarte,
a todos pedimos cuidarte
y guiarte por buen camino.
Y que Dios sea tu padrino
que te lleve de la mano,
que hasta Él se sienta ufano,
por tu buen comportamiento,
por tu hermoso sentimiento,
celestial y no mundano.

Valeria: ¡Felicidades¡
festejemos tus XV años,
aléjate del engaño,
de muchas banalidades
demuestra tus cualidades
aptitud y rectitud,
sobre todo gratitud
para toda tu familia
y todo aquel que te auxilia
que sea tu don y virtud.

Levantemos nuestra copa
por deserle lo mejor 
y decirle al Redentor,
cuida a Valeria… ¡Salud!

Nikky

Hace quince años, se concebía
producto del amor enamorado,
un sueño jamás imaginado
nuestro sueño… su corazón latía.

Un bello ser  que pronto nacería
un regalo que Dios había otorgado
muy pronto lloró de nuestro lado
un ángel con el don de la alegría.

Rodaron nuestras lágrimas, contentos
de que por fin llegara a nuestras vidas
y fue luz, ilusión y consentida
arropada de amor y sentimiento.

Sin dudar… del enlace el complemento,
el ángel que curo  nuestras heridas,
y hasta hoy nuestra joya más querida
el principio y  final de hermoso cuento.

Mi niña de mirada encantadora
velamos con cuidado tu existencia
enseñando con ejemplo la decencia
y un camino de luz como la aurora.

Eres la rosa que a la vida afloras
hoy tus pétalos… abre con prudencia,
traspasas el portal de adolescencia
el portal, donde a la niñez no añoras.

Los juegos de muñecas se acabaron
y peluches llegarán tarde o temprano
el amor tampoco es muy lejano
hoy nuevas sensaciones comenzaron.

Escucha a personas que triunfaron
aléjate del ruido y lo mundano
jamás te negaremos nuestra mano
y ama a aquellos que te amaron.

Sé humilde, jamas seas vanidosa
distingue bien, lo malo de lo honrado
recuerda que cosechas lo sembrado
y sé siempre… amable y bondadosa.

Si llega un revés, sé valerosa
y la virtud mantenla de tu lado
que inteligente manejes el enfado
con tu corazón… cauta y cuidadosa.

Hoy doy gracias al cielo tu figura
pues nos llenas de dicha y alegría
quinceañera bañada en fantasía
te queremos tus padres con dulzura.

Hemos pedido al Señor de las alturas
llegar a festejar tu bello día
¡Oh! que vida feliz la vida mía
de besar a nuestra hija con ternura.

¡Brindemos los presentes por fortuna!
a quinceañera que aquí les presentamos
después un aplauso es que le damos
y que baile su vals bajo la luna.

Lili

Seguramente hace quince años, nuestros padres y todas las personas queridas que ahora nos acompañan estaban pendientes del nacimiento de un ser, que desde antes ya se cobijaba con ternura y un amor inmenso, tan inmenso como el amor que los padres prodigan a sus hijos; el único que nunca engaña, que es verdad y es el único amor que nunca mengua, siempre crece, el único que nunca pide, siempre da; el único que jamás te olvida, jamás te deja ni jamás se va.

Naciste y junto contigo, nacieron también nuevas ilusiones, nuevas alegrías, nuevos retos y proyectos que el arquitecto destino ha sabido construir mediante tus padres y hermanos. Un castillo en el cual la única reina eres tú, un castillo que luce majestoso, infranqueable a las mentiras, al odio, al falso orgullo que dentro de si alberga a un corazón puro e inocente en espera de sus sueños, un castillo que habrá de proteger ante la adversidad de todos los males que la sociedad ha engendrado, es el castillo construido del amor…

Amor que te acompaña en tu pasado, que vive en tu presente y que vivirá en tu futuro; Lilí eres ahora, una rosa floreciente despidiendo aroma de tierna juventud, bañada de rocío de la adolescencia y que adornas orgullosamente el rosal de la familia.

Cuídate bella rosa quinceañera y disfruta tu roció, que no se deshoje con la lluvia de la tentación; confía en tu rosal que te sostiene. El tiempo se va, no se detiene, el amor es el único perene y el único que se da del corazón.

Maternal Anhelo

Aún recuerdo aquella madre ilusionada
cuidando a sus varones que tenía
sin embargo su sueño incompleto se veía
por la ausencia de una niña que faltaba.

Y al querer realizar esa quimera
sin importar las mil adversidades,
utilizó sus tantas facultades
arriesgando también la vida entera.

Y en la espera al cielo le pedía
que su sueño por fin se le cumpliera,
que terminara feliz la larga espera
pues le faltaba también su compañía.

Fue escuchado ese ruego por constante
y por verla cuando adentro le cantaba,
cuando su amor también comunicaba
por el cordón de la vida de la infante.

Y por fin su sueño se cumplía
nació la niña que tanto es que anhelaba
con caricias y amor la cobijaba
y la vida otra vez le sonreía.

Han pasado quince inviernos, quince primaveras
quince veranos con sus quince otoños,
y orgullosa muestra a la menor de sus retoños
y por ver realizadas sus quimeras.

Da las gracias al cielo por lo dado
y abusando le pide con vehemencia,
le pide conceda la licencia
de ver otro sueño realizado.

Que a su niña todos la protejan
que camine por el sendero recto,
que distinga lo perfecto de imperfecto
sin ser de esas aves que se alejan.

Que viva feliz toda su vida
y si llora que llore de alegría,
que la llene también de valentía
cuando llegue a tener una caída.

Que sepa que cuando le hacen un regaño
que sólo ha sido un correctivo necesario
porque los errores se cometen diario
y la incidencia los orilla al daño.

Que escuche los consejos de los viejos
pues ellos han tenido la experiencia,
que han marcado con penas su existencia
y resuelto problemas más complejos.

Que sea perenne y hermosa cual diamante
que tenga luz propia como estrella,
y que al paso de la vida deje huella
que nunca mire atrás, siempre adelante.

Que el amor verdadero la corteje
cuando la alcance el destino ineludible,
que no exista entre su vida lo imposible
al saber que su sueño la proteje.

Felicidades quinceañera hermosa
te lo dice tu padre emocionado,
yo he estado también siempre a tu lado
secundando el sueño de mi esposa.

Diana Flores Anzaldua